El Internet de las Cosas como ventaja competitiva en las operaciones logísticas
El futuro está aquí! y paradójicamente la pandemia ha contribuido a su aceleramiento en todas las actividades de nuestras vidas y una de ellas ha sido el Transporte y la Logística en general.
Stanzione Espresso hoy aborda este apasionante tema en el cual F-STANZIONE, S.A. como agente de aduanas, al igual que la mayoría de las empresas del sector, ya tienen su visión puesta en este necesario e imprescindible camino que hay que recorrer para superar con éxito la etapa postpandemia y proporcionar un óptimo servicio a nuestros clientes.
Las empresas están dando pasos firmes en este sentido con un replanteamiento de las relaciones hombre/máquina para automatizar y optimizar los procesos logísticos, la gestión de datos y la experiencia del cliente. Es en este punto en donde el Iot (Internet of Thing) nos coloca a las puertas del futuro con una cadena de suministro y una logística que avanzan indetenibles para hacernos la vida más llevadera, por no decir más fácil.
De cómo el Internet de las Cosas nació de la mano de la cadena de suministro
Cuenta la leyenda que allí estaba el londinense Kevin Ashton en las oficinas de Investigación y Desarrollo de Procter & Gamble, echándole coco, pensando en un nombre interesante para la presentación que escribía en la pantalla de su potente laptop IBM ThinkPad.
Con esta presentación buscaba convencer a los ejecutivos de P&G y Gillette de poner etiquetas de identificación de radiofrecuencia y otros sensores en los productos de la cadena de suministro.
Las etiquetas y sensores transmitirían los datos de ubicación de los productos, para conocer si estaban en un almacén, en un estante o si ya habían sido vendidos.
Kevin Ashton rememora: «Sabía que quería incluir la palabra “Internet”, porque entonces podría obtener algo de aceptación. Todos estos CEO estaban muy entusiasmados con internet , pero en ese momento todavía era solo la revolución punto com. Para la mayoría de las personas, el Internet todavía era de acceso telefónico. Nadie hablaba de Internet de nada«.
«La gente usaba la frase ‘empaque inteligente’, pero me estaba aburriendo con eso», resalta Ashton, cofundador del Centro de Identificación Automática del Instituto de Tecnología de Massachusetts y autor del inspirador libro «Cómo volar un caballo».
“Estaba hablando de que la cadena de suministro es una ‘Red de cosas’ y que Internet es una ‘Red de bits’, y de cómo la tecnología de sensores fusionaría los dos. Entonces me vino a la mente un «Internet de las Cosas» y pensé: «Eso servirá, o tal vez incluso mejor». Eureka!!! Ya Ashton tenía el título de la presentación y mucho más.
Así Kevin Ashton entró a la reunión con la seguridad de tener un nombre con gancho para su presentación. Una tropa de ejecutivos de Gillette, a la sazón interesados en asociarse con P&G en el proyecto de los sensores entraron con él. (P&G luego adquirió Gillette, pero en 1990, eran empresas independientes). Ashton dio apertura a la presentación y lo que a la postre se convertiría en una frase de fama mundial surgió de su segura y templada voz: El Internet de las Cosas había nacido.
El origen de las cosas: AutoID Lab apareció para conectarlo todo
El concepto de Internet de las Cosas (IoT) se afianzó desde 1999 como producto del trabajo realizado por “AutoID Lab” motorizado por el reconocido Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), que puede ser definido como una red inteligente de conexiones y comunicaciones entre objetos físicos.
Auto-ID Lab surgió como una asociación inédita entre casi 100 empresas globales entre las que destaca P&G y siete de las principales universidades de investigación del mundo, lideradas por el Instituto de Tecnología de Massachusetts, en los EE.UU.; complementada por la Universidad de Cambridge, en el Reino Unido; la Universidad de Adelaide, en Australia; la Universidad Keio, en Japón; la Universidad de St. Gallen, en Suiza; la Universidad Fudan, en China y KAIST (anteriormente ICU) en Corea.
Junto con la tecnológica comunidad GS1 EPCglobal, se han ido creando los estándares que están poniendo la tecnología RFID o Identificación por Radiofrecuencia, a trabajar al servicio de las empresas y la gente.
La identificación por radiofrecuencia (RFID) es un concepto con grandes implicaciones para el mundo entero. Para visualizarlo mejor, si por ejemplo colocamos un microchip con antena en un contenedor, o en una mercancia específica, una computadora podrá «observarlo», obtener información acerca del contenedor y seguirlo en toda su trayectoria.
De esta manera podemos automatizar la información del inventario y ¡Se acabaron los envíos perdidos o dirigidos en forma errónea! Ya no es necesario adivinar la cantidad de material en la cadena de suministro o cuántos productos están en los estantes de una tienda o invertir horas y horas de trabajo contabilizando materiales.
Información logística en tiempo real
Auto-ID Lab y la comunidad GS1 EPCglobal han unido la brillantez de sus mentes para diseñar, desarrollar, testear e implementar una infraestructura global, una capa en la parte superior de Internet, que está haciendo posible que las computadoras ubiquen un objeto en cualquier lugar del mundo, posibilitando recopilar e intercambiar información relacionada con un objeto en particular.
Esta red no solo alimentará información confiable y detallada, en tiempo real en las aplicaciones comerciales; sino que está marcando el comienzo de una era totalmente nueva de innovación y oportunidades, pensemos en ello y el cambio que generará, que de hecho ya lo está haciendo, en el área aduanera y logística.
Esta visión tecnológica del mundo está comenzando a experimentarse en operaciones de la cadena de suministro, almacenaje, transportes, puertos, aeropuertos y en las importantes entregas en la última milla. ¿Las ventajas y beneficios? Son muchas en la eficiencia operativa, reducción de costos, seguridad y en la experiencia del cliente.
El Internet de las Cosas (IoT) si bien ya venía manifestando su importancia, la misma ha sido catapultada con el devenir de la pandemia y una nueva era de readaptación e impulso tecnológico que se abre en el mundo.
En ese sentido merece ser destacado un documento elaborado por DHL y Cisco en donde proponen el concepto de “Sentir y Hacer o Dar Sentido”, en el cual “Sentir” hace referencia al monitoreo de diferentes aspectos de la cadena de suministro a través de la tecnología y otros medios, mientras que “Hacer o Dar Sentido”, significa transformar las grandes cantidades de datos que recibimos diariamente en insights o informaciones que permitan tomar decisiones y dar soluciones.
Pero yendo más allá de la teoría, repasemos algunas de las mejores prácticas en torno al Internet de las Cosas (IoT) que ya están impactando favorablemente al sector:
- Flotas de Transporte: una mejor y eficiente gestión
Número de entregas justo a tiempo, información electrónica precisa de las entregas, seguimiento del transporte, alertas en tiempo real de dificultades en la ruta, son algunas de las ventajas y beneficios que ofrece el Internet de las Cosas.
Con datos como estos y otras informaciones, Amazon pudo crear y patentar un algoritmo que tiene la capacidad de anticipar una compra antes de ser confirmada, esto les permite gestionar sus envíos con anticipación.
La medición y seguimiento de la productividad de conductores y por ende de sus vehículos es vital para mejorar la eficiencia de las empresas del sector.
- Costos: reducción y eficiencia
La publicación especializada Supply Chain 247 nos comparte números importantes, al indicar que las plataformas de IoT son responsables de “99,5% de eficiencia en la gestión de inventarios, una reducción del 30% en los costos laborales y un 30% menos de tiempo de procesamiento en cada envío”.
Esto obedece a que hoy en día los sensores integrados con tecnología IoT están en capacidad de detectar el stock de que dispone una tienda y realizar automáticamente un pedido, lo que resulta en altos porcentajes de eficiencia y ahorro.
- Visibilidad y seguimiento en tiempo real: beneficios operacionales
La visibilidad y seguimiento de toda la operación logística, proporciona información necesaria para tomar acciones más efectivas, en menos tiempo y a través de los canales adecuados.
La importancia de convertir la cadena de suministro en un depurado sistema que interactúe a través de plataformas en la nube, es algo valioso para cualquier gerente o administrador logístico.
Esto permite proporcionar soluciones un paso por delante de posibles problemas en el funcionamiento de la cadena y llevar la trazabilidad de todos los productos a través de cada etapa del proceso operativo.
· Entregas en la Última Milla: el Internet de las Cosas para un mejor servicio
Las entregas en la ultima milla significan casi el 30% del costo total de cada entrega. Esto se debe a una alta dependencia de factores externos, como las variaciones en el precio de la gasolina, el tráfico, la eficiencia de los conductores, etc.
Es considerada como la parte del proceso más costosa, susceptible de menor eficiencia y más problemática en toda la cadena de suministro.
El valor que la IoT puede aportar a los proveedores de logística se refleja en las conexiones que se dan en tiempo real entre la gestión de entregas en la última milla, la administración logística y los consumidores finales.
Por ejemplo la tecnología de IoT nos permite que un vehículo de despacho pueda conectar en su ruta de entregas con el teléfono celular de un cliente que ha realizado una compra. Así se podría realizar un escaneo de los productos que se llevan, y si este producto está en el vehículo, realizar la entrega de forma inmediata.
El Internet de las Cosas significa el futuro hoy, la tecnología a nuestro servicio, una interconexión de cosas que definitivamente nos harán la vida mucho más fácil.
El puerto de Long Beach innova como el primer terminal eléctrico de contenedores del mundo
El puerto de Long Beach culminó con éxito las obras del primer terminal de contenedores totalmente eléctrico del mundo.
El Long Beach Container Terminal (LBCT), ahora cuenta con equipos completamente eléctricos con cero emisiones, tras un proceso de construcción que comenzó hace 10 años, en mayo de 2011.
La primera fase del terminal se inauguró en 2016, lo que permitió que la infraestructura iniciara sus operaciones, mientras que la 2da. fase concluyó en octubre del 2017.
La tercera y última fase de este innovador terminal del puerto norteamericano se terminó en julio de este año 2021, con una explanada completa de contenedores, un edificación dedicada a la administración y una instalación de trenes en el muelle diseñada para movilizar 1,1 millones de Teus al año, lo que conlleva a un menor tráfico de camiones.
Este terminal cuenta además con 14 Grúas Pórtico capaces de operar tres megaportacontedores a la vez.
Todos los buques que atracan en el Long Beach Container Terminal tienen acceso a las conexiones eléctricas de muelle, lo que les permite apagar los motores diésel.
«Como la primera megaterminal totalmente eléctrica y de cero emisiones del mundo, LBCT establece el estándar de la industria marítima para mover carga de manera sostenible, manteniendo la competitividad del puerto de Long Beach”, manifestó Mario Cordero, director ejecutivo del puerto estadounidense.
Comercio exterior de Chile se incrementó 41% en julio y marca nuevo récord
El intercambio comercial de Chile creció hasta alcanzar los USD 101.393 millones en los primeros siete meses de 2021, para un crecimiento del 36% comparado con el mismo lapso del 2020, según un informe presentado por la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (Subrei) con cifras del Banco Central.
Este registro es el más alto histórico alcanzado por el comercio exterior chileno, superando por primera vez la barrera de los US$ 100 mil millones al séptimo mes de un año.
En cuanto a productos, el auge de las exportaciones de Chile sigue siendo marcado por el cobre, cuyas ventas al extranjero determinaron la cifra récord de USD 30.295 millones, con una impresionante alza del 54% frente a 2020, llegando a representar el 57% de los embarques.
Según el medio digital Portal Portuario, el subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales, Rodrigo Yáñez, destacó que en gran parte del mundo se observa que el avance de los procesos de vacunación y la reducción de las restricciones relacionadas con la pandemia están impulsado la demanda de bienes y servicios a través de los canales de venta presenciales, estimulando el reabastecimiento de inventarios para el segundo semestre y la preparación del stock para fin de año, situación que ha marcado el repunte de la actividad productiva y comercial en nuestros mayores socios comerciales, entre ellos China, Estados Unidos, la Unión Europea, Japón y Corea del Sur.
En el mes de julio el intercambio comercial de Chile alcanzó USD 15.998 millones, con un alza del 41% frente a julio de 2020, esto significa el mayor intercambio comercial para un solo mes desde que existe registro.
Volúmenes de importación de contenedores de EE. UU. alcanzaron punto máximo en agosto
La infraestructura portuaria de contenedores de EE. UU. se encuentra ante una gran presión en agosto, ya que esperan un volumen récord de cargamentos de mercancías por la reposición de existencias de parte de los minoristas, previo a las vacaciones de fin de año.
El mes de agosto, de acuerdo a lo proyectado por la Federación Nacional de Minoristas (NRF) de EEUU, tendrá un récord de 2,37 millones de contenedores de 20 pies con productos importados.
Se trataría del recuento mensual más elevado desde que el NRF comenzó a rastrear las importaciones en 2002, según un informe de la consultora S&P Platts.
Agosto representa el inicio de la temporada alta tradicional para los envíos de los fabricantes en el este de Asia a los minoristas en América del Norte antes de la temporada de compras navideñas, pero pese a este récord se espera un aumento mayor en las importaciones a principios de la temporada alta de agosto a noviembre, lo que vendría a mitigar el impacto de los retrasos en la cadena de suministro, de acuerdo al NRF.
“La tensión de la continua expansión económica está ejerciendo una presión considerable sobre la cadena de suministro logístico”, dijo Ben Hackett, fundador de la firma de consultoría comercial Hackett Associates.
