El transporte internacional de carga implica múltiples riesgos que pueden afectar la integridad y el valor de la mercancÃa. Desde daños fÃsicos por accidentes, robos, pérdidas, hasta fenómenos naturales o demoras en aduanas, las amenazas son variadas y requieren protección adecuada.
Por eso, contar con un seguro de carga es fundamental para garantizar la tranquilidad y la continuidad de las operaciones comerciales. Este seguro cubre los posibles perjuicios que la mercancÃa pueda sufrir durante el tránsito, ofreciendo respaldo económico y facilitando la resolución de reclamaciones.
Existen diferentes tipos de seguros según la naturaleza de la carga y el modo de transporte:
- Seguro contra todo riesgo: Cubre prácticamente cualquier daño o pérdida, salvo exclusiones especÃficas. Es la opción más completa y recomendada para cargas valiosas o sensibles.
- Seguro contra riesgos nombrados: Protege contra riesgos especÃficos detallados en la póliza, como incendio, robo o accidente, pero no cubre todos los posibles escenarios.
- Seguro marÃtimo: Diseñado para cargas transportadas por vÃa marÃtima, cubriendo desde pérdida total hasta daños parciales causados por eventos en el mar.
- Seguro terrestre y aéreo: Adaptado a las particularidades del transporte por carretera o avión, considerando los riesgos asociados a cada modalidad.
Para elegir el seguro adecuado, es clave evaluar factores como el tipo de mercancÃa, valor comercial, ruta, medio de transporte y normativas internacionales. Contar con asesorÃa especializada permite tomar decisiones acertadas que evitan sorpresas y pérdidas económicas.
En resumen, un buen seguro en el transporte internacional de carga no solo protege la inversión, sino que también fortalece la confianza entre exportadores, importadores y operadores logÃsticos, facilitando un comercio global más seguro y eficiente.